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¿Quién no quisiera estar así ahora mismo?: con los ojos cerrados, oliendo el producto floral que están usando en tu piel, recibiendo masajes y enmudeciendo todas las preocupaciones por al menos unos minutos. ¿Quién no lo quisiera? 

Los tratamientos estéticos o de relajación son necesarios —y todos coincidiremos en ello—, entonces, eso quiere decir que, más allá de sus beneficios físicos, ¿también tienen un gran impacto positivo en nuestras emociones, nuestros ánimos y, en general, en nuestros aspectos más psicológicos? 

Por supuesto. Todos lo hemos vivido y, si aún así no te convence, también existen estudios de la ciencia de la psicología que lo corroboran: dichos tratamientos te brindan mayor autoconfianza, seguridad y también ayudan a retrasar el envejecimiento, ya que sirven para nivelar el estrés y mejorar el metabolismo. En este sentido, la investigación publicada por la revista científica Aesthetic Surgery Journal afirma que el 75% de las personas estudiadas aseguró verse más joven, “concretamente 6,3 años menos que su edad biológica”, después de entregarse a un tratamiento. 

Dicho esto, parece lo suficientemente tentador como para ir y consentirse un rato en el spa. Entre los tratamientos que puedes hacerte y, de hecho, recomendamos que te los hagas, son los masajes, oxígeno para el rostro, aguas termales y el cuidado capilar. 

 

¿Para qué son los tratamientos capilares? 

¿Nunca te has hecho un cuidado capilar a profundidad? Descuida, te explicamos un poco de qué trata. 

Cuando hablamos de tratamientos capilares nos referimos a un procedimiento específico diseñado para mejorar la salud, apariencia y condición general del cabello y el cuero cabelludo. Estos tratamientos se llevan a cabo utilizando una variedad de productos y técnicas que abordan diferentes problemas capilares —frizz, caspa, caída del cabello, entre otros— y proporcionan soluciones específicas para cada caso. Es decir, dependiendo de los tipos de tratamientos capilares que te hagas, obtendrás distintos beneficios. 

Los tratamientos capilares pueden realizarse en salones de belleza o en casa, según su complejidad y la necesidad de supervisión profesional. Si lo realizarás personalmente y desde casa, te recomendamos usar productos adecuados para tus necesidades y marcas de calidad como L'Oréal, Redken, Guerlain, Cala o Sisley, nuestras preferidas. 

Entre los productos, puedes escoger el que mejor se te acomode: acondicionadores, shampoos, cremas, ceras, sprays, sérums y la lista no acaba. Sin embargo, antes de proceder a comprar, te aconsejamos que primero le consultes a tu estilista o profesional en cabello para asegurarte de que el tratamiento sea el más adecuado y seguro para tu caso particular. 

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Tratamientos capilares más populares 

Si bien el propósito de este arte medicinal es cuidar la salud del cabello y cuero cabelludo, hay técnicas y productos que se especializan en diferentes tipos de tratamientos capilares: 

  1. Hidratación: son aplicados para lograr la restauración de la humedad del cabello seco y dañado, mejorando su suavidad, brillo y manejabilidad. 

  2. Nutrición: proporcionan vitaminas y nutrientes esenciales para fortalecer el cabello desde la raíz hasta las puntas, reduciendo la fragilidad y la rotura. 

  3. Reparación: su objetivo es reparar el cabello dañado y quebradizo debido a la exposición a productos químicos, calor excesivo, peinados agresivos, entre otros factores. 

  4. Control de la caspa: estos tratamientos están diseñados para aliviar la caspa y los problemas asociados con el cuero cabelludo seco o con exceso de grasa. 

  5. Estimulación del crecimiento: se enfocan en estimular el crecimiento del cabello y prevenir la caída excesiva. 

  6. Protección contra el calor y el sol: cuidan el cabello del daño causado por la exposición al calor, los rayos UV y otros factores ambientales. 

  7. Tratamientos anticaspa: para combatir problemas de caspa, se usan productos especiales que ayudan a reducir la formación de escamas y a aliviar el picor y la irritación del cuero cabelludo. 

  8. Tratamientos de acondicionamiento profundo: se usan productos que penetran en la estructura del cabello para proporcionar una nutrición más intensa y reparar daños profundos. 

  9. Tratamientos de keratina: la keratina es una proteína que compone el cabello y estos tratamientos la utilizan para fortalecer y alisar el cabello dañado o encrespado. 

  10. Tratamientos antiencrespamiento: son especiales para controlar y suavizar el cabello encrespado, proporcionando un aspecto más pulido y manejable. 

 

¿Cómo saber cuándo debes hacerte un tratamiento? 

Aparecerán algunos signos en tu cuero cabelludo y cabello si es que debes realizarte algún tratamiento. Toma en cuenta estas señales: 

  1. Sequedad y opacidad 
  2. Puntas abiertas 
  3. Cabello dañado 
  4. Caída excesiva del cabello 
  5. Cuero cabelludo irritado 
  6. Encrespamiento y falta de definición 
  7. Pérdida de elasticidad 
  8. Falta de volumen 
  9. Acumulación de productos 

Si aparecen algunos de estos síntomas, ya sabes qué hacer: ir donde un especialista y consultarle cuál es el mejor procedimiento para restaurar tu salud capilar. Esperamos que te haya sido de gran ayuda esta guía y que no dudes en pasar por nuestras tiendas para priorizar tu cuidado. Recuerda, la salud estética también repercute en nuestro estado de ánimo y la percepción que podamos tener sobre nosotros mismos, por eso es importante.